Detectar pederastas en internet
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En un macroestudio (https://www.unicef.es/publicacion/impacto-de-la-tecnologia-en-la-adolescencia) cuyos resultados dio a conocer en noviembre de 2021, Unicef constató que el 10% de los menores han tenido proposiciones sexuales por parte de adultos a través de internet, que el 20% de los menores ha quedado en persona con alguien que ha conocido en internet y estimó que el 20% de los menores sufre contactos habituales de adultos con intenciones sexuales. Desde entonces lejos de disminuir, estos contactos van en aumento.

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Siendo conscientes de los riesgos a los que están expuestos los menores y viendo cada día  en los centros educativos a los que vamos que los contactos de pederastas con intenciones sexuales se están incrementando mucho, hemos decidido crear una iniciativa para ayudar a niños, adolescentes y familias a detectar este tipo de acercamientos antes de que sea demasiado tarde. Para ello, hemos revisado los diferentes estudios -que tristemente no son muchos- que hay sobre los pederastas y sus técnicas de acercamiento en juegos online y redes sociales. Pensamos que la forma más eficiente de prevenir estos acercamientos es conocerlos. 

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En primaria hemos ideado una forma de reconocer estos acercamientos sin mencionar las palabras "pederasta" o "intenciones sexuales" y dejamos en manos de cada familia que lo haga como considere oportuno. Nos basaremos en comportamientos que merecen "tarjetas rojas digitales". En secundaria nos parece importante explicarlo todo sin tapujos para que los adolescentes conozcan bien algunas de las consecuencias que puede tener la falta de atención en el mundo online.

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Hemos sacado a la luz las señales de alerta para que niños, adolescentes y familias puedan estar atentos, reconocerlas y así detectar pederastas en internet y actuar de forma rápida bloqueando a esos depredadores, tanto en videojuegos, en redes sociales o en otras plataformas digitales en las que se pueda tener contacto con desconocidos.

QUÉ ES EL GROOMING

El Grooming es un proceso de manipulación psicológica a un/a menor por parte de un adulto. El objetivo es ejercer un control emocional sobre los menores para conseguir sus fines sexuales. Este proceso tiene varias fases aunque no siempre se dan todas ni en el mismo orden.

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Notas a tener en cuenta

Es importante tener en cuenta que los acercamientos varían en función de la edad y características de las víctimas. Así, es muy propable que cuando las víctimas son niños los pederastas se hagan pasar por niños para ganar su confianza y varíen la forma la que se muestran, pero cuando las víctimas son adolescentes los delincuentes también pueden optar por mostrar su edad real y una personalidad parecida a la real. De la misma forma, algunos pederastas buscan "relaciones" físicas duraderas con menores, pero algunos acercamientos se pueden centrar en recopilar material sexual infantil de forma rápida. Habitualmente estos depredadores tienen múltiples víctimas de forma simultánea.

También es muy importante entender, que aunque esta campaña se centre en juegos online y redes sociales, cualquier plataforma online de internet donde pueda haber menores es un lugar de riesgo porque también puede haber pederastas esperando. Muchas familias ponen el foco en los juegos online y en las redes sociales, pero por ejemplo un foro de lectura online también puede ser un lugar de riesgo para menores sin supervisión, o el juego apalabrados, o cualquier otro lugar donde podamos hablar con desconocidos independientemente de la finalidad de los creadores de ese lugar.

Muchos depredadores se sienten atraídos por franjas concretas de edad, más que por otras caraterísticas físicas.

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Otros datos relacionados con el Grooming

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El diario británico The Guardian publico un articulo hace poco (https://www.theguardian.com/technology/2022/aug/09/self-generated-sexual-abuse-of-children-aged-seven-to-10-rises-two-thirds) haciéndose eco de un informe de IWF, la Fundación de Vigilancia de Internet (https://www.iwf.org.uk/).

 

La Fundación de Vigilancia de Internet (IWF) vio casi 20.000 informes de contenido de explotación sexual infantil autogenerado en los primeros seis meses de 2022, en comparación con poco menos de 12.000 en el mismo período del año anterior. La inquietante tendencia mundial ha crecido rápidamente desde el confinamiento inicial del coronavirus, con casos que involucran a ese grupo de edad (de 7 a 10 años) en un aumento del 350 % desde el primer semestre de 2020.

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Si bien el aumento más rápido en las imágenes autogeneradas estuvo entre el grupo de edad de 7 a 10 años, el grupo de edad de 11 a 13 años genera la mayor cantidad de tales imágenes reportadas por el IWF, con 56.000 imágenes marcadas en los primeros seis meses del año.

 

Las imágenes de explotación sexual infantil autogeneradas generalmente se crean utilizando cámaras web o teléfonos inteligentes y luego se comparten en línea en un número creciente de plataformas. La IWF dice que los niños son engañados o extorsionados para que produzcan una imagen o vídeo de sí mismos.

 

La mayoría de los ejemplos ocurren en los dormitorios, donde se pueden ver juguetes, cestas de lavandería y armarios de fondo. En un caso, se puede ver a un niño aparentemente leyendo instrucciones en una pantalla, mientras que en otro el borde de una manta es visible, lo que implica que la víctima está lista para cerrarse o ocultar rápidamente lo que se le ha pedido que haga. En muchos casos se podía escuchar a las familias estaban en casa ajenas a lo que estaba ocurriendo.

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Fases del Grooming

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  • Búsqueda de víctimas en las diferentes plataformas digitales. Buscan en redes sociales y juegos online mirando la información que hay en los perfiles, publicaciones y chats de los menores y todo lo que comparten. Si los menores hacen referencia a centros educativos, juegos online, actividades deportivas u otros lugares, también visitan esas páginas para recabar más información. Generalmente, adaptan su lenguaje, su forma de mostrarse y acercarse en función de las características de la víctima, como su edad, sexo, gustos…

 

  • Contacto. Realizan el contacto a través de mensajes directos en juegos y redes sociales, a través de comentarios en publicaciones, respuestas a historias… e intentan comenzar una relación de “amistad”. En esta fase, intentan conocer mejor a la víctima. Con preguntas directas o indirectas comienzan a recabar información sobre la relación del o de la menor con la familia, su situación económica, su situación emocional… Siempre van a intentar trasladar la conversación a una plataforma más privada que deje menor rastro, generalmente una app de mensajería.

 

  • Confianza. El pederasta quiere establecer una relación de confianza, por lo que le comienza a contar cosas inventadas sobre sí mismo para que la víctima piense que tienen más cosas en común. Al comenzar a ganar su confianza, intentará alejar al menor de su familia y de su círculo social cercano. El objetivo es convertirse en la persona más cercana e importante. Suelen pedirles mantener la relación en “secreto”. El pederasta busca que la víctima solo confíe en él.

 

  • Regalos y halagos. El “groomer” se gana a los menores a través de halagos constantes, les da dinero o les regala cosas virtuales en juegos o redes sociales para que los menores desarrollen un sentimiento de deuda con él y para que lo idealicen. Si los menores se están exponiendo en redes sociales, los depredadores alimentan estos comportamientos y les animan a continuar y a ser cada vez más explícitos. Los depredadores pueden fingir enamorarse de las víctimas para aumentar el nivel de confianza.

 

  • Ataque. Una vez que el pederasta siente que tiene un lazo de confianza, comienzan las peticiones de material sexual infantil (a través de fotos, videos, videollamadas…) o la petición de encuentros físicos. El pederasta va a mostrar una insistencia muy fuerte y comenzará a mostrarse tal y como es en realidad, acosando e intimidando a los menores. Si el/la menor ha accedido a mandar algo el pederasta utilizará lo que tiene como forma de chantaje y extorsión, amenazando con publicar lo que tiene o puede amenazar con dañar a la familia del menor.

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No hay un peridodo de tiempo establecido para cada una de las fases, varía mucho en función de la "urgencia" de los depredadores pero al tener víctimas múltiples simultáneamente, pueden llegar estar semanas o meses ganándose la confianza de los menores. Entre los depredadres se crean comunidades para ayudarse mutuamente y para compartir material sexual infantil. Entre la ayuda que se proporcionan figuran manuales escritos por psicólogos para hablar con niños y adolescentes y consejos para ganar la confianza de los menores, así como para aterrorizarles de una forma más eficiente en la fase de ataque.

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Muchos pederastas buscan menores vulnerables que tengan poca atención positiva por parte de sus familias y con tendencias a la depresión, ya que son más manipulables. Durante las conversaciones que tienen con los menores les hacen preguntas "camufladas" para que los menores den este tipo de información sin darse cuenta.

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El pederasta también puede optar por enviar fotos y videos sexuales de otros menores a las víctimas como si fuesen suyas para solicitar a cambio material sexual de las víctimas o solicitar encuentros.

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Riesgos
Rojo

SEÑALES DE ALERTA


Basándonos en las fases de acercamiento más comunes, las señales de alerta o las acciones que merecen "tarjetas rojas digitales", es decir bloqueos instantáneos en redes sociales, juegos online u otras plataformas digitales son las siguientes:

- Un desconocido, alguien que no hemos visto cara a cara en la calle, nos pide mantener las conversaciones que tenemos o la "relación" que hemos desarrollado en silencio, nos pide que no se lo contemos a nadie. Esto se puede hacer de muchas formas, por ejemplo diciendo que su familia le tienen castigado sin redes, juegos o smartphone y que si se enteran podrían enfadarse mucho.

- Un desconocido, alguien que no hemos visto cara a cara en la calle, nos pide seguir hablando por apps de mensajería sacándonos fuera de la plataforma del juego o de la red social. Se pueden usar excusas como que es más cómodo, que la app de mensajería es más rápida... lo cierto es que lo hacen porque deja menos rastro.

- Un desconocido, alguien que no hemos visto cara a cara en la calle, nos hace preguntas personales sobre miembros de la familia, nuestra relación con ellos, la situación económica... Estas preguntas pueden ir camufladas para que los menores no sean conscientes de la cantidad de información privada que están dando. Muchas veces, sobre todo en el caso de adolescentes se comunican a través de llamadas de voz donde los menores se desahogan con los depredadores.

- Un desconocido, alguien que no hemos visto cara a cara en la calle, nos envía regalos dentro de juegos, nos compra ítems o herramientas para avanzar, nos manda dinero virtual o dinero físico. Nadie regala nada sin esperar algo a cambio, y menos un desconocido. 

- Un desconocido, alguien que no hemos visto cara a cara en la calle, nos pide fotos o videos nuestros, videoconferencias o nos hace proposiciones sexuales. Nos mandan o piden imágenes íntimas o sexuales.  Estamos obervando que desde hace unos meses comienzan a pedir imágenes aparentemente inofensivas como imágenes de los pies, las rodillas, codos... y van aumentando el nivel de las peticiones. A veces comienzan pidiendo poses sensuales o similares, y cuando el depredador quiera material explícito o contacto físicoí utilizará todo lo que tiene para chantajear a las víctimas.

 

En el caso de los adolescentes, los menores utilizan las redes sociales para conocer gente, es muy habitual que hablen con desconocidos, por eso es importante que presten atenciòn a las señales de alerta.


¿CÓMO ACTUAR SI NOS CUENTAN QUE ESTÁN SIENDO AMENAZADOS?

INCIBE, el instituto de ciberseguridad de España, tiene artículos sobre el grooming (https://www.incibe.es/aprendeciberseguridad/grooming), las recomendaciones son:

Red de apoyo. Deben saber que siempre pueden acudir a los adultos de su confianza en busca de ayuda aunque "hayan hecho una tontería", ya que se trata de un problema de gravedad. Es el momento de transmitir al menor una actitud de seguridad y madurez para que se sienta protegido/a.

Ser prudentes y mantener la calma. Si el menor ha decidido dar el paso de contarnos lo que está sucediendo, debemos valorar el esfuerzo que eso supone y no dudar o cuestionar sus palabras. No culpabilizar a la víctima y reafirmar nuestro apoyo incondicional.

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Recoger información. No debemos dejarnos llevar por la situación o actuar irreflexivamente. Contactar con el acosador o borrar información (contenidos enviados, conversaciones, perfiles en redes sociales, etc.) puede dificultar la resolución del problema o incluso agravarlo.

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Nunca aceptar un chantaje. Si nos encontramos ante un agresor que tiene (o dice tener) alguna información sensible en su poder, nunca debemos ceder a la manipulación, ya que empeorará la situación.

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Denuncia. Ante una situación de grooming es imprescindible contactar con las Fuerzas y Cuerpos de seguridad. Es un delito complejo y ellos sabrán indicarnos los pasos que debemos seguir. Además, puede haber otros menores afectados por un mismo acosador: con nuestra denuncia nos implicaremos en su detención.

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Ayuda psicológica. Las consecuencias pueden ser difíciles de afrontar, tanto para el menor como para su familia. El centro de salud y su centro educativo pueden ofrecer apoyo emocional y seguimiento si es necesario.

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Aprovechamos para recordar la importancia de respetar las edades para usar redes sociales (13 años la más permisiva) y juegos online (cada juego tiene su edad recomendada). También es importante que  una vez que tengan la edad para poder utilzar las redes sociales, se haga un uso conjunto con la familia, con una cuenta familiar y en el horario establecido para que las familias puedan ir guiando y enseñando a los menores. La edad recomendada para tener smartphone es a partir de los 14 años.

¿CÓMO NOS PODEMOS UNIR A LA INICIATIVA?

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Para participar en la iniciativa facilitamos un texto resumido y unas imágenes que todas las personas interesadas pueden compartir a través de redes sociales, grupos de WhatsApp,  medios de comunicación u otras formas  utilizando, si es oportuno, el hastag #tarjetarojadigital. La primera imagen es para trabajar las señales de alerta con niños de primaria, la segunda es para familias y adolescentes. También se pueden trabajar las imágenes y las señales de alerta en los centros educativos con alumnos/as y familias, o realizar videos en redes sociales para dar a conocer las señales de alerta. Este es el texto resumido:

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El grooming es el proceso de manipulación emocional que adultos ejercen sobre menores para conseguir sus objetivos sexuales. Los pederastas buscan victimas en juegos online, redes sociales y en internet en general. Las señales de alerta suelen ser:

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- Petición de mantener las conversaciones o la relación online en secreto

- La propuesta de sacarnos de las plataformas online en las que nos hemos conocido para seguir las conversaciones a través de apps de mensajería más privadas.

- Preguntas personales sobre nuestra familia, situación, relaciones...

- El envío de regalos digitales en juegos o redes sociales, o incluso dinero físico

- Petición o envío de imágenes sensuales o sexuales

 

Muchos niños y adolescentes juegan y hablan con desconocidos a diaro en el mundo online, tanto en juegos online como en redes sociales u otras plataformas digitales. Al detectar cualquiera de estas señales, se recomienda bloquear directamente al desconocido. #tarjetarojadigital

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​Más información en www.macsonrisas.es/tarjetarojadigital

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Detección de acercamientos online de pederastas en la ESO, prevención del grooming

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